Cuando nos cuidamos a nosotros mismos, nos sentimos mejor física, mental y emocionalmente. Esto nos permite estar más presentes y conectados con los demás, lo que puede ayudarnos a crear relaciones más fuertes y significativas.

A continuación, te presentamos algunos ejemplos de cómo cuidar nuestro bienestar puede ayudarnos a cuidar a los demás:

• Cuando estamos descansados y saludables, tenemos más energía para dedicar a nuestros seres queridos. Podemos pasar más tiempo con ellos, jugar con ellos y ayudarles con sus necesidades. 

• Cuando te sientes bien con contigo mismo, eres más capaz de mostrar empatía y compasión a los demás. Puedes entender mejor sus sentimientos y necesidades, y  ofrecerles apoyo y comprensión. 

• Cuando tenemos una buena salud mental, somos más capaces de manejar el estrés y las emociones difíciles. Esto nos ayuda a evitar conflictos y a crear un entorno más pacífico y armonioso para nosotros y para nuestros seres queridos. 

Cuidar nuestro bienestar es una inversión en nosotros mismos y en los demás. Cuando nos sentimos bien, podemos dar lo mejor de nosotros mismos a las personas que queremos. Estar y sentirte bien es algo que puedes lograr fácilmente, con constancia y disciplina, lo importante es tener claro el objetivo de estar bien para que puedas cumplir contigo

• Aliméntate sanamente. Una dieta saludable te dará la energía que necesitas para estar activo y disfrutar de la vida. Trata de cuidar tu ingesta de azúcares y carbohidratos equilibrando con frutas, verduras y proteínas. Y sigue los consejos de nuestros asesores en nutrición @dra.michellepalau y @nutreperalta

• Haz ejercicio regularmente. El ejercicio es bueno para tu cuerpo y tu mente. Te ayuda a sentirte más feliz, más seguro y con más energía para todo tu día.

• Duerme lo suficiente. El sueño es esencial para tu salud física y mental. Cuando duermes lo suficiente, tienes más energía, eres más productivo y tienes un mejor estado de ánimo. La cantidad de horas de sueño necesarias varía según la persona y cambia a lo largo del ciclo de vida. La mayoría de los adultos necesitan entre 7 y 8 horas de sueño cada noche. Los recién nacidos, por otro lado, duermen entre 16 y 18 horas al día, y los niños en edad preescolar duermen entre 11 y 12 horas al día.

• Evita el estrés. El estrés puede dañar tu salud física y mental. Hay muchas maneras de reducir el estrés, como el ejercicio, la meditación y pasar tiempo con los seres queridos. 

Cuidar tu bienestar es una elección. Es una elección que vale la pena. Cuando te cuidas a ti mismo, estás creando una mejor vida para ti y para los demás.